A VUELO DE PAJARO
- JORGE RIESTRA
CEAL,
Narradores de Hoy, Bs As, 1ra edición 1972, 11x19, 148 p.
Tapa
blanda, rustica editorial, ejemplar sin uso, excelente estado.
Su
estructuración asimila, desde el cuento, la morfología de la
novela Manhattan Transfer. Ésta, realmente, no fue tomada como
modelo, pero la comparación deja intuir la presencia de un esquema
común, no explícito pero funcional, para otorgar un formato al
discurso que se dispone a aglutinar historias diversas que confluyen
en una unidad espacial y temporal. A vuelo de pájaro (1972) marca
otro hito en su escritura: es la salida, la extensión horizontal de
su búsqueda, la libre asociación del fluir de la conciencia, el
juego del montaje y refuerza el registro coloquial ya anunciado en
sus obras anteriores. En esta colección hay demasiados síntomas de
cambio, tanto en su escritura como en sus tópicos. No sólo se
diluye retóricamente la presencia autorial en el sujeto de la
enunciación: se cuestiona sinceramente, además, el derecho a tal
autoría.
La
colección de relatos presenta dos textos fundamentales: “El fluir
del tiempo” y “A vuelo de pájaro”. El primero es el balance
existencial, el segundo su textualización literaria. Todo el volumen
asume la denuncia de problemas sociales, históricos y también la
propia autocrítica generacional. En “El fluir del tiempo”
encontramos la respuesta a ese cambio de actitud autorial en su
discurso literario, porque se deduce que es difícil tomar la palabra
cuando los principios se gastaron, la generación se anuló, la
ciudad cambió, no hay ‘adentro’ ni ‘afuera’, la convulsión
es general, se quiere operar pero no se sabe cómo hacerlo. Este
doloroso balance personal y generacional conserva, con un sabor mucho
más ácido, el tono autobiográfico y confesional de sus obras
anteriores, pero se resuelve con mucho humor en otro texto de
registro estilístico y tópicos bastante distanciados.
“A
vuelo de pájaro” es un texto conformado por un tejido de montajes,
donde una serie limitada de elementos se van ramificando en piezas de
un considerable “rompecabezas”. Al mismo tiempo que tales piezas
se multiplican, se vuelven a armar –de acuerdo con un ritmo propio-
para formar otro conjunto.
El
narrador, en “A vuelo de pájaro”, trata de enlazar la marcha de
una procesión, junto a una manifestación de protesta estudiantil,
el trayecto de un ladrón especializado en transporte urbano y los
movimientos de un piquete policial, mediante el encadenamiento versal
suspendido de una canción dedicada a la Virgen María
A
vuelo de Pájaro fue marcado por la Marina, durante el Proceso
Genocida, como de ‘máxima peligrosidad’.
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