DEL
PALACIO HASTA LAS VILLAS (1ra ed.) - RAMON PEREZ CABRERA
RAMON
PEREZ CABRERA, ARISTIDES
Nuestra
América, Bs As, 1ra edición, 2007, 15x23, 416 p. Tapa blanda con
solapas, rustica editorial, excelente estado de conservación,
ejemplar sin uso.
Esta
es una obra escrita desde la diversidad de recuerdos, memorias y
pensamientos de un conjunto de combatientes, actores y protagonistas
de hechos, acciones y acontecimientos que abarcan un período
decisivo de la última y definitiva etapa de la lucha por la
liberación de Cuba. Para ello, su autor entrevistó a veinticuatro
combatientes, trabajó con publicaciones testimoniales de veintidós
participantes de la lucha, tanto en la ciudad como en el Escambray.
Recopiló información de veintiséis combatientes del Movimiento 26
de Julio. Pero además, fue revisado por veintinueve compañeros,
demostrando así la seriedad de una publicación que constituye un
monumento a la historia del Directorio Revolucionario 13 de marzo.
En
apretada pero clara síntesis realiza un recorrido desde el fin del
colonialismo español hasta el golpe de estado producido por
Fulgencio Batista, quien fuera apoyado por los EE. UU. Su objetivo es
ubicar y demostrar al lector la condición neocolonial de Cuba, como
punto de partida, y comprender las razones por las cuales una parte
importante de la juventud del Centenario se lanzó desde las aulas
universitarias con la convicción de continuar la lucha de la
mambisada del siglo XIX, mantenida por hombres como Mella, Villena y
Guiteras. La razón de luchar —que da inicio al libro— es la
explicación, en términos ideológicos, del por qué se lanzaron al
combate para desafiar el poder de la tiranía con las ideas de Martí.
Ramón
Pérez Cabrera hace un recuento necesario de la fundación, por los
jóvenes de la FEU, del Directorio Revolucionario 13 de marzo y
parte, justamente del 15 de enero de 1953, momento este en que los
estudiantes universitarios rechazaron el ultraje de que fue objeto el
busto de Julio Antonio Mella, fundador de la FEU. Su narración
recoge múltiples movilizaciones estudiantiles, presentación de su
documento programático en su Manifiesto al pueblo de Cuba y la
preparación militar para la lucha armada contra la tiranía
batistiana.
El
valor extraordinario de este libro radica, ante todo, en que
constituye una versión de primera mano de las perspectivas desde las
cuales un sector importante de la Generación del Centenario,
emprendió las luchas revolucionarias contra la dictadura de
Fulgencio Batista.
Arístides
mueve al lector, indistintamente, por pasajes anecdóticos dentro de
los mismos acontecimientos, destacando los rasgos de sus
protagonistas en el quehacer revolucionario; testimonios que
mantienen el tono fresco y virginal de las actuaciones, mientras se
desarrollaron algunos de los hechos.
Esta
juventud universitaria representada por la FEU o el Directorio
Revolucionario, la del asalto a Radio Reloj y al Palacio
Presidencial, la misma que conspiró en el clandestinaje y fundó un
frente guerrillero en el Escambray, es exactamente la que tomó las
ideas de Martí en 1953 y se lanzó al combate por la soberanía e
independencia de la Patria. No hay diferencias entre el movimiento 26
de julio y el Directorio Revolucionario 13 de marzo. No la puede
haber, porque la prédica martiana era la ideología que animaba sus
corazones. Fueron, simplemente, jóvenes comprometidos con su época,
que comprendieron y supieron ponerse a la altura del momento
histórico que les correspondió vivir.
La
unidad, elemento fundamental de todo proceso revolucionario, quedó
sellada en la lucha contra la tiranía batistiana. En múltiples
combates los rebeldes del M-26-7 y del DR-13 de marzo se unieron y,
con la fuerza de las ideas, lucharon por la victoria.
El
triunfo de la Revolución, el 1ro de enero de 1959, marcó para los
combatientes del Directorio Revolucionario 13 de marzo una nueva
etapa de lucha, pero ahora —como expresa el autor— incorporados,
en su inmensa mayoría, al «proceso que recién comenzaba». La
fusión, en la Santa Clara del Che, se logró luchando contra el
ejército de la tiranía. Por sus calles y edificios, combatientes de
una y otra organización se enlazaron y fueron protagonistas de una
obra colosal en el centro de la isla. Se cumplía el objetivo de la
invasión: llevar la guerra hasta Occidente
POR
CUALQUIER CONSULTA COMUNICATE CON NOSOTROS. Envíos
La Pluma
Libros Rosario
Libros
con más historias que las que cuentan.