MIGUEL
ANGEL (nuevo) HEINRICH KOCH
Salvat,
Barcelona, 1985, 20x13, 189 pp. Tapa blanda, rustica original de
editor,
ejemplar nuevo, excelente estado. Abundantemente ilustrado.
Traducción de Rosa Pilar Blanco Santos ISBN 84345814477
Si
algún nombre despierta curiosidad en la historia del arte universal,
ese nombre es el de Miguel Ángel Buonarroti , uno de los máximos
representantes del Renacimiento Italiano. A la vida de este genio
entre los genios podemos aproximarnos mediante la biografía de
Heinrich Koch, publicada por Salvat editores en el año de 1985.
Este libro está recomendado especialmente para aquellos lectores que no buscamos un lenguaje cargado de excesos ni una saturación de información vacua en el texto. El biógrafo parece ser consciente de ello y por eso las páginas que dedica a recuperar la memoria del artista florentino solo le sirven para precisar los aspectos relevantes de su vida y de su obra. Eso sí, lo hace con absoluta objetividad, basando su trabajo investigativo en documentos de la época y en el propio testimonio que Miguel Ángel dejó en sus cartas, y en las impresiones generales sobre su obra que también consignó por escrito. El libro, sin ser muy extenso, cubre de principio a fin el periplo vital de Miguel Ángel, y para ello Heinrich Koch lo divide en doce capítulos cuyos títulos señalan las etapas que son presentadas en orden cronológico. El carácter de Miguel Ángel, su postura frente al republicanismo, las influencias en su obra, son temas abordados en esta biografía que no sólo está construida a base de texto, pues otro de sus componentes son las ilustraciones que van apareciendo a medida que leemos y que nos sirven para completar la información sobre el hombre, su obra, y el momento histórico en que ésta se desarrolló.
Este libro está recomendado especialmente para aquellos lectores que no buscamos un lenguaje cargado de excesos ni una saturación de información vacua en el texto. El biógrafo parece ser consciente de ello y por eso las páginas que dedica a recuperar la memoria del artista florentino solo le sirven para precisar los aspectos relevantes de su vida y de su obra. Eso sí, lo hace con absoluta objetividad, basando su trabajo investigativo en documentos de la época y en el propio testimonio que Miguel Ángel dejó en sus cartas, y en las impresiones generales sobre su obra que también consignó por escrito. El libro, sin ser muy extenso, cubre de principio a fin el periplo vital de Miguel Ángel, y para ello Heinrich Koch lo divide en doce capítulos cuyos títulos señalan las etapas que son presentadas en orden cronológico. El carácter de Miguel Ángel, su postura frente al republicanismo, las influencias en su obra, son temas abordados en esta biografía que no sólo está construida a base de texto, pues otro de sus componentes son las ilustraciones que van apareciendo a medida que leemos y que nos sirven para completar la información sobre el hombre, su obra, y el momento histórico en que ésta se desarrolló.
En
Miguel Ángel, Heinrich Koch nos cuenta cómo el hijo de Ludovico
Buonarroti Simoni y Francesca di Neri, demuestra su inclinación por
el arte a una edad temprana, y cómo con tan solo trece años ingresa
al taller de Domenico Ghirlandaio. Esta experiencia como aprendiz del
pintor no dura más de dos años, pues luego ingresa a la escuela de
escultura que Lorenzo de Médicis fundó en los jardines de San
Marco. Este miembro de los Médicis fue su mecenas, y para esta
familia es que Miguel Ángel realiza “Virgen de la escalera”, y
“Combate de los lapitas y los centauros”, las primeras esculturas
de su carrera. Tenía apenas dieciséis años y a partir de entonces
el artista en ciernes fue consolidando un estilo que se hace presente
en “La Pietá”, cuando ya residía en Roma y se le encarga el
monumento que aún se conserva en San Pedro en El Vaticano. A esta
obra le suceden “El David” que fue colocado en la plaza de la
Signoria, la obra pictórica de La sagrada familia, El mausoleo de
Julio II, trabajo sobre el cual dejó una nota escrita: “Hago
constar que yo, Miguel Ángel, escultor florentino, me he
comprometido a esculpir en mármol la tumba del papa Julio II, por
encargo del cardenal Aginensis y el datarius, los cuales supervisarán
la obra tras su muerte como ejecutores que son de sus últimas
voluntades. El precio estipulado es de 16.500 ducados de oro….”,
y continúa describiendo ampliamente el proyecto. La Capilla Sixtina
fue un trabajo pictórico que realizó entre los años 1508 y 1512, y
aunque el artista no se sentía cómodo con la pintura, esta obra ha
sido considerada una pieza maestra del arte de todos los tiempos.
POR
CUALQUIER CONSULTA COMUNICATE CON NOSOTROS
ENVIOS.
RETIROS EN PERSONA
LA
PLUMA LIBROS ROSARIO
LIBROS
CON MAS HISTORIAS QUE LAS QUE CUENTAN
https://laplumalibros.mercadoshops.com.ar